¿De dónde venimos los argentinos?, ¿cuáles son nuestros orígenes étnicos y culturales?
Plantearnos tales interrogantes e intentar generar respuestas convincentes resulta indispensable respecto a la concientización sobre nuestra identidad colectiva. Muchas veces hemos escuchado algunas de esas preguntas; sin embargo, en contadísimas ocasiones las respuestas obtenidas resultaron ser profundas y abarcativas. En general, una misma premisa, pretendidamente “objetiva”, se instalaba con fuerza y cerraba el debate: “Los argentinos descendemos de los barcos”. En el imaginario colectivo predomina la idea de que el país fue construido exclusivamente a partir de la inmigración europea fomentada por el Estado entre 1870 y 1930; por ende, mayormente se desconoce el aporte significativo de los grupos humanos preexistentes y, en los casos en que se tiene noción de la fuerte presencia indígena y africana en el período contemporáneo al proceso inmigratorio, predominantemente se cree que dichos grupos fueron asimilados étnica y culturalmente; o directamente, como en el caso de los afroporteños, se sostiene que han “desaparecido”.
Indudablemente, una parte significativa de la actual población de Argentina es producto del aluvión inmigratorio europeo. Sin embargo, aunque la hipótesis de que “descendemos de los barcos de la inmigración europea” tiene un firme sustento histórico, la frase en sí es falsa, ya que excluye de nuestra identidad los valiosísimos aportes étnicos y culturales de los pueblos originarios de nuestro continente y la población negra africana que llegó a nuestra tierra como consecuencia de la esclavitud, dos de los grandes colectivos que la afirmación en cuestión ha invisibilizado. Esencialmente, el objetivo de este libro radica en visibilizar a uno de esos grupos, cuyos integrantes también llegaron a nuestras tierras en barcos, mas de orígenes funestos e inhumanos. Una población que forma parte de los relatos históricos de Argentina cuando se analiza el período colonial y gran parte del siglo XIX, especialmente en Buenos Aires, pero que a partir de finales de dicha centuria sencillamente “desaparece” de la historia.
Desde un punto de vista historiográfico esta investigación se inscribe en un nuevo paradigma interpretativo que centra el eje analítico de la problemática de los afroporteños en la noción de “invisibilización”. El objetivo general radica, entonces, en indagar respecto al rol histórico que ejerció la marginación cultural en relación a la construcción de un imaginario colectivo predominante que dio por sentada la extinción de los afroporteños. El análisis de los mecanismos utilizados por las élites dominantes en el proceso de invisibilización cultural de las comunidades afrodescendientes, llevado a cabo entre finales del siglo XIX y principios del XX, constituye el sustento primordial de esta investigación, ya que a partir de dicho proceso se circunscribió la noción de nacionalidad argentina solamente al componente étnico blanco y europeo, invisibilizando del imaginario colectivo nuestra herencia Negra.
Lo quiero!!!